In Barbastro, Somontano
SE JUBILAN LOS PROFESIONALES, PROBLEMAS EN EL MERCADO LABORAL DE BARBASTRO
Por Eduardo Pérez Barrau
El progresivo paso a la jubilación de las generaciones nacidas a finales de la década de los 50 y principios de los 60 va a acarrear una grave disfunción en el mercado laboral de Barbastro y, extensivamente, en todo el eje del Cinca. Este caudal de experiencia laboral va a resultar difícil de reemplazar los próximos años y va poner en serios aprietos a muchos sectores y empresas de nuestro territorio.
Ya está ocurriendo. Hoy en día, incluso inmersos en una grave crisis económica, hay multitud de perfiles profesionales demandados por las empresas desaparecidos del mercado laboral. Hablamos de los oficios tradicionales de electricista, fontanería, carpintería, trabajadores del metal, etc. Una situación que pone en riesgo de ralentización, incluso paralización, a muchos negocios e inversiones en nuestro territorio y que coexiste, sorpresivamente, con unas tasas de paro sostenidas en el tiempo.
Ante esta situación juegan en contra varios factores que empeoraran este diagnóstico. El primero es la demografía. Las generaciones que se incorporan al mercado laboral en nuestras comarcas son menos numerosas que en el pasado. El pico de nacimientos se produjo en nuestra zona en la década de los 70 iniciándose posteriormente una disminución paulatina hasta la actualidad. Esta brecha generacional no se ha tenido nunca en cuenta a la hora de elaborar una política activa – y atractiva- de empleo. Otro factor principal ha sido el progresivo cambio en las preferencias formativas de los jóvenes. Las sucesivas leyes educativas no han corregido, y quizás han agravado, una cierta estigmatización de los oficios como salida profesional. Un imperdonable error político que se manifiesta en la desconexión creciente entre la oferta educativa y lo que ofrece el mundo laboral.
Otro factor destacable, exclusivo de nuestro territorio, es la limitación del contingente de población en edad trabajar. Esta restricción es común a la que padece la España interior o más concretamente, el medio rural. Este hándicap ha sido flanqueado por la incorporación de población activa del resto país y de trabajadores emigrantes en cada vez más sectores de actividad pero sin llegar a solucionar el problema aludido. Entre las razones que lo explican destacan, en el caso de la población extranjera, las carencias formativas arrastradas desde sus países de origen y la política de convalidación de títulos llevada a cabo por la administración.
Esta disfuncionalidad del mercado laboral está ocasionando unos efectos perjudiciales en la economía de nuestra ciudad y del eje del Cinca. Como decíamos al principio, en cuanto a la facilidad para encontrar, por las empresas, los perfiles adecuados para su actividad, y como consecuencia de esta escasez, en la competencia entre las empresas por estos trabajadores capacitados y en la rotación de los mismos una vez formados.
Resulta imperativo abordar esta situación poniendo el foco en la calidad formativa que reciben los jóvenes y en las oportunidades de inserción laboral que ofrece nuestro territorio. Una iniciativa que, necesariamente, debe partir de la implicación de todos los colectivos e instituciones involucrados en el desarrollo social y económico de nuestra ciudad y del eje del Cinca. Ejemplos de éxito no faltan.
Recent Posts

Start typing and press Enter to search